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Hace 20 años en Santiago (y en otras ciudades también) no habían los calores de se dan en estos últimos años. Por eso el uso de aire acondicionado era muy discreto y habían mitos populares que el mismo producía resfríos.

Hoy con el calentamiento global, cada verano es peor que el anterior... y el nivel de tolerancia al calor es cada vez menor. De ahí que se ha empezado a utilizar más este tipo de aparatos.

Todavía supone un ALTO CONSUMO DE ELECTRICIDAD y los costos de la misma en Chile son bastante altos, porque seguimos dependiendo del petróleo, que para colmo de males es importado.

Así que mi publicación va EN NOMBRE DE TODOS LOS CLIENTES DE CHILE A LOS EMPRENDEDORES, QUE A PESAR DEL ESFUERZO, HAN EMPEZADO A COLOCAR AIRES ACONDICIONADOS EN SUS LOCALES COMERCIALES.

Y un llamado a las empresas eléctricas, para que acaben de utilizar toda esa energía solar que Chile tiene de sobra, a ver si bajan los costos, tomando en cuenta además que es una energía LIMPIA.