Para que no se convierta en realidad el cuento “El Rey desnudo”, de Hans Christian Andersen (o así algunos lo afirman), el discurso “políticamente correcto” no se puede convertir en un dogma, el cual garantiza “paz y seguridad” al que lo venere y así mismo garantice “hierro y fuego” para quién lo rechaze. Esas son las bases de la censura política, ideológica y social, sobre las cuales se edifican las DICTADURAS.
Mientras haya RESPETO y CIVILIDAD, soy un defensor de la “Libertad de Expresión”, la cual lo único que garantiza es que NO EXISTA LA UNANIMIDAD y eso en la práctica, significa que unos estarán a favor y otros estarán en contra de lo expresado.
Esa es la base sobre la cual descansa la DEMOCRACIA, donde ninguna JUSTIFICACIÓN que permita el florecimiento de totalitarismos dictatoriales, tiene, ni tendrá cabida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario