sábado, 26 de octubre de 2019

CONSCIENCIA


Tenemos el "libre albedrío" para decidir lo que queramos, pero no debemos olvidar que cada decisión que tomemos, tiene sus consecuencias... por ende debemos hacernos cargo de ellas (sobre todo si no son agradables).

Para tomar la "mejor" decisión (a cada paso) para NUESTRAS VIDAS, debemos ser una persona CALMADA, NO REACTIVA; de esa manera podremos ser "ayudados" por nuestras INTUICIONES, que no son otra cosa que la divinidad expresándose a través de nuestras tripas.

No vayamos con el "rebaño" sólo porque nos veamos con "lana" frente al espejo, sino porque esa haya sido una DECISIÓN tomada a través de la REFLEXIÓN y la CALMA. De esta manera estaríamos evadiendo una buena cantidad de sufrimientos para nosotros y nuestro entorno.

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